En la primera edición del año de esta sección, nos tocará hablar sobre uno de los futbolistas de la generación del 2004, ya asentado en el primer filial bético demostrando, además, un nivel soberbio.
Este chico no es otro que Carlos Reina, futbolista sevillano de 19 años el cuál conoceremos a fondo. El joven centrocampista es canterano bético desde edad muy temprana, pasando por los escalafones inferiores.
Reina empezó a destacar en el Juvenil Liga Nacional, donde disputó 2 temporadas al completo. Posteriormente, tras dos temporadas en División de Honor, pasó al Calavera, equipo perteneciente al Real Betis, en una categoría similar a la anterior, anotando 11 goles en 37 partidos que le hicieron dar el salto al primer equipo juvenil de nuevo. Por su juventud y talento, pasó al Juvenil de División de Honor.
En División de Honor, sus números y actuaciones no dejaron a nadie insatisfecho, pues hizo una gran temporada, anotando un gran número de goles, dejando unas actuaciones muy interesantes, demostrando así que porfin estaba preparado para dar un salto más en su trayectoria.
Tras renovar el pasado verano hasta 2026, Carlos Reina pasó a formar parte de la plantilla del Betis Deportivo, donde está gozando de oportunidades y minutos esta temporada, los cuáles está aprovechando al máximo, preparándole así con una mentalidad más profesional. Tras jugar un total de 568 minutos con el primer filial bético, el futbolista está preparado para tener más protagonismo y demostrar sus cualidades y su nivel deportivo, que no es poco. Ya esta temporada ha jugado nueve partidos.
Es un futbolista muy polivalente, ya que puede jugar en ambos extremos ademas de en su posición natural, la de MCO. Además, el futbolista despuntó tanto en los escalafones inferiores que llegó a participar en algún entrenamiento a las órdenes de Pellegrini, el mayor premio para un canterano.
Está claro que estamos hablando de un claro proyecto de futuro en Heliopolis, que va rompiendo puertas y avanzando en su irrupción como futbolista y deportista de élite a pasos agigantados.