En el partido que enfrentaba al Real Betis frente al Cádiz en el Nuevo Mirandilla se produjo una expulsión que daría tanto que hablar que incluso un año después el tema sigue sin cerrarse. Mateu sacaba a Sergio Canales dos tarjetas amarillas en apenas cinco segundos, para sorpresa de los béticos que no entendieron la dureza y la poca paciencia del colegiado.
Una sanción que se ampliaría en las posteriores declaraciones de un Canales que aseguraba que su tarjeta estaba “premeditada” por Mateu, lo que le llevó a recibir un castigo de cuatro partidos de inhabilitación por el Comité de Competición. Como se pudo saber en El Larguero, el cántabro fue expulsado por dirigirse al árbitro en los siguientes términos: “Si no puedo hablar, entonces no me preguntes más por temas personales”.
Mateu Lahoz también salió al quite para ofrecer su versión sobre lo ocurrido en la fase final de aquel partido liguero, argumentando que las protestas de Sergio fueron vehementes y reiteradas e incluso aseguró que el futbolista emprendió camino hacia vestuarios instantes antes de ver la segunda tarjeta amarilla. Además, añade que Canales acudió al final del partido a los vestuarios arbitrales para ofrecer una disculpa.
El Real Betis junto con Sergio Canales acudieron a la justicia ordinaria para recurrir su sanción y hoy se ha oficializado la declaración de inocencia y la suspensión inmediata de todos los castigos impuestos por el Comité Arbitral al santanderino. Sergio Canales ganó en la justicia ordinaria lo que no halló en la deportiva y podrá zanjar este tema de una vez por todas y centrarse en su futuro en México.
