Cinco meses y dos semanas después, el Real Betis volvió a saber lo que es ganar lejos del Villamarín con un partido muy completo por parte de la escasa plantilla que viajó a Palma de Mallorca. El partido se resolvió con un gran tanto de Altimira en el tiempo de añadido de la primera parte, siendo esta una de las pocas ocasiones claras que hubo en el encuentro. Lo cierto es que el despliegue físico y defensivo que cosechó el equipo de Manuel Pellegrini en el día de ayer es más que remarcable, con nombres propios a destacar como el de Sokratis.
El central griego disputó los 90 minutos completos, la primera fase del encuentro acompañado por un Pezzella que tuvo que ser sustituido por un fuerte golpe en el descanso. La ausencia del estandarte argentino no supuso un problema para el bloque defensivo dado que el despliegue del dorsal 19 fue colosal. Fraguó un choque más que notable yendo bien abajo a tapar espacios, rápido en las coberturas, sólido en el balón aéreo y dando muestras de gran central propia de la experiencia que ostenta.
Contando con la de ayer, fue la quinta aparición del exfutbolista de Olympiacos con la elástica verdiblanca y empieza a demostrar los galones que le definen. Actuando como pareja de baile de los arietes del Vasco Aguirre, Abdón Prats y Cyle Larin, que venían con mucha confianza tras hacer gol en el duelo copero ante el Girona.
Gran actuación del central griego que tras las bajas de Chadi Riad, Bartra y ayer la ausencia de Pezzella en la segunda mitad, heredó el puesto de jefe de la defensa y supo responder de muy buena manera. Su puesto en el once sigue estando garantizado debido a la falta de jugadores. Pese a esto, con actuaciones como la de anoche, Sokratis devuelve la competitividad a una defensa que necesitaba de un zaguero como él.