El partido del pasado sábado en Montjuïc no fue aciago solamente por el duro correctivo que sufrió el Real Betis en el marcador, sino también porque le hizo sumar otro futbolista importante más a la enfermería.
Y es que Rui Silva, en un golpeo en largo con su pierna izquierda alrededor del minuto 35, sintió un pinchazo en el aductor, aguantando hasta el descanso, pero teniendo que ser entonces sustituido por Fran Vieites, que debutaba en Primera División, ya que Claudio Bravo aún no estaba disponible. Así, tras las exploraciones que se le hicieron en el día de ayer al guardameta portugués, se ha detectado una pequeña rotura fibrilar en el aductor de su pierna izquierda, haciéndole perderse varias semanas de competición. Como poco, se perderá los próximos cuatro partidos de liga y las dos primeras jornadas de la fase de grupos de la Europa League. En ese caso, podría reaparecer el 22 de octubre en el Coliseum ante el Getafe, ya después del próximo parón de selecciones. Una verdadera faena para el equipo perder a su guardameta titular, sumado a la escasez de efectivos en el centro de la defensa.
En cuanto al futuro más inmediato, Claudio Bravo ha entrenado esta mañana con total normalidad junto a sus compañeros, superando sus problemas en el sóleo y acelerando su recuperación para poder ser el guardameta titular del equipo este jueves en Glasgow frente al Rangers, y también en los próximos partidos. Además, también se ha entrenado con el grupo Andrés Guardado, tras sufrir un esguince de tobillo la pasada semana en una de las sesiones en la Ciudad Deportiva, y ser baja también para el partido en Barcelona. Noticias, estas, relativamente positivas para Manuel Pellegrini, al cual le urge recuperar efectivos en varias parcelas del campo para poder mantener la competitividad.