Corría el minuto 48 en las postrimerías de una primera mitad de un derbi que agonizaba. El Real Betis rodaba en superioridad numérica y por delante en el marcador, tras la expulsión de un sobrepasado Montiel y el autogol de el recién incorporado al partido para sustituir la baja del argentino, Jesús Navas. El equipo verdiblanco dominaba el partido y pudo dictar sentencia en las botas de Borja Iglesias, que estrellaba en Bono un clamoroso mano a mano.
Sin embargo, todo iba a cambiar en ese fatídico minuto. Fekir pugnaba un balón en el córner del Sevilla, cuando lo que parecía un forcejeo termina con el Papu Gómez dolorido sobre el césped del Villamarín. En primera instancia, el asistente indicó la falta del francés y el colegiado Sánchez Martínez, castigó con amarilla la acción. No obstante, la sangre en la pequeña brecha del jugador sevillista y una llamada tan soprendente como inusual desde la sala VAR de González González, convencieron al trencilla murciano para cambiar de opinión, anulando la amarilla y sacando del partido por roja directa al atacante verdiblanco.
No es la primera vez que Sánchez Martínez enseña una tarjeta roja a Nabil Fekir, de hecho, fue el primer árbitro en expulsarlo en LaLiga, tras una conducta un tanto persecutoria en un partido frente al F.C Barcelona. Además, el árbitro lorquino es el que más tarjetas amarillas (78) y más rojas (6) ha mostrado al Real Betis, en sólo 24 encuentros, como profesional.
Hoy se ha dado a conocer que el conjunto verdiblanco alegará dicha expulsión ante el Comité de Competición. Una acción rigurosa que, a priori, no concuerda con las decisiones potencialmente revisables desde el vídeo arbitraje si recordamos que sólo se rearbitrarán «errores claros, obvios y manifiestos», según señala la Regla 5.4 de las Reglas del Juego de la IFAB, pero que, al repetir un “frame” concreto en repetidas ocasiones y a cámara lenta, la interpretación puede ser otra muy diferente a la realidad.
El propio Papu Gómez, en la posterior rueda de prensa, comentó a los medios que es una jugada normal en un deporte de contacto y que, por consiguiente, castigar con la expulsión estas acciones hace daño al conocido como deporte rey. Una decisión que marcó el rumbo de un partido importante para el Real Betis y que entra en la lista de jugadas rigurosas arbitradas al conjunto de Heliópolis, que intentará que Nabil Fekir esté disponible para la cita ante él Valencia C.F en Mestalla.