Miles de béticos se desplazaron hasta la capital de Italia con la intención de acompañar a su equipo en el tercer partido de la fase de grupos de la Europa League. Desde la semana pasada, han ido convocándose diversos puntos de encuentro para la reunión de los béticos, situando como punto de referencia la Piazza del Popolo.
Sin embargo, paralelamente, los cuerpos de seguridad romanos alertaban de cambios en la zona de reunión, para evitar problemas en una ciudad altamente turística, y rehusaban a las grandes concentraciones de seguidores verdiblancos en los puntos céntricos de la ciudad eterna.
La realidad dejó ver a unos visitantes respetuosos, con un objetivo claro desde el principio de animar a los suyos y disfrutar de la experiencia. Esto dejó como resultado un desplazamiento sin conflictos, sin intervenciones policiales y por encima de todo, unas concentraciones bastante deportivas.
No obstante, varios medios de comunicación se han hecho eco de la crítica hacia los verdiblancos por la suciedad en las calles romanas. Muchos de esos titulares iban cargados de saña, algunos buscando el famoso clickbait, dejando en mal lugar a los aficionados béticos.
Aficionados béticos que no tardaron en responder, masivamente, ante las críticas desproporcionadas que recibían tras la fiesta en el Olímpico de Roma. Para defender su postura, argumentan la dificultad de encontrar por la zona papeleras o contenedores donde verter la basura y, además, que una rápida intervención policial para desalojar la zona no permitió a muchos béticos, que sacaban bolsas de basura para limpiar la plaza, recoger sus restos personalmente.
Los aficionados visitantes muestran con detalle fotos y vídeos en los que se observa su intención de colaborar con el personal de limpieza de Roma. Un ejemplo de ello es el hilo de Twitter de “Friquis Verdes”, que detalla muy bien, con fotografías adjuntas, lo sucedido en la ciudad de las siete colinas.