Las polémicas arbitrales se han convertido en un fenómeno bastante común en LaLiga Santander, no hay jornada alguna en la que el debate no este servido. En el pasado encuentro disputado entre Celta y Betis no hubo excepción en cuanto a esto refiere.
Simplemente con mirar los datos del ya mencionado encuentro aparecen las preguntas entre los béticos. Revisando de manera breve y rápida algunos de los mismos, nos encontramos con un Real Betis que hizo un total de tres faltas en todo el partido y recibió tres amarillas y una tarjeta roja. Dos de estas tres amarillas recibidas por los jugadores béticos fueron por protestar, una a German Pezzella tras un encontronazo con el delantero del conjunto vigués Larsen, y otra a Sergio Canales, quien acabó desquiciado de la numerosa cantidad de faltas que recibió durante el encuentro. Observando las del Celta, el conjunto gallego realizó un total de 26 faltas durante el partido y recibió solo cuatro tarjetas amarillas.
Aún así, las faltas y amonestaciones que hubo durante el encuentro no es el foco principal de la polémica. El debate se genera en un centro desde el costado izquierdo de Álex Moreno que impacta en la mano de un defensor del Celta. En dicho centro, el defensor del conjunto celeste eleva la mano despegando la misma por completo del cuerpo y sin tenerla apoyada en el suelo. A esto se le suma, que la dirección del esférico se viese completamente alterada por el impacto, y que desde el VAR no avisaran al árbitro de campo para analizar o rearbitrar la jugada como si se hizo en la jugada de la roja a Luiz Felipe.
Los datos expuestos por Fran Martínez justifican el desconcierto bético surgido en la pasada tarde de domingo. Según indica el periodista, el conjunto de Manuel Pellegrini es el equipo que más falta ha recibido en lo que va de temporada también siendo el conjunto que menos faltas comete, y además, es el equipo de puestos Champions que menos faltas comete para recibir amarilla -4,9-.
