En la tarde de hoy, el Real Betis ha emitido un comunicado informando que el portero Dani Marín deberá de pasar por quirófano para someterse a una operación debido a “una lesión de ligamento cruzado anterior que le provoca inestabilidad en su rodilla derecha”.
El guardameta asturiano ya tuvo unas molestias en dicha parte en el mes de diciembre que le dejó fuera de las convocatorias de Pellegrini durante un tiempo. Será la segunda vez que se opere quirúrgicamente este año, después de que en septiembre, sufriera un esguince de grado 3 en su tobillo izquierdo en un entrenamiento con la selección española sub-21.
Este imprevisto, frustra las intenciones que tenia el conjunto verdiblanco en ceder al portero para que fuera cogiendo ritmo de competición y disponer de minutos.
Debido a la gran competencia que tiene en el club, no ha podido tener oportunidades de brillar en el Benito Villamarín. El joven portero llegó al conjunto heliopolitano en el verano de 2019, y debutó en el primer partido liguero frente al Valladolid debido a la expulsión de Joel Robles. Después de ese encuentro volvió a jugar frente al Barcelona donde los verdiblancos caerían por cinco goles a dos. Tras ese partido no volvería a jugar hasta las eliminatorias de Copa del Rey donde el Betis caería eliminado en tercera ronda por el Rayo Vallecano. En el tramo final de campeonato tuvo la oportunidad de poder demostrar su valor y jugar un total de cuatro partidos con tan solo una victoria, tres derrotas y encajando cinco goles.
Hasta la fecha, tras un año y medio en la capital andaluza, ha disputado ocho partidos con 12 goles encajados y tan solo dejando una vez la portería a cero.