El derbi sevillano empezaba con dos equipos respentándose y tanteando por la posesión del balón. En ciertos momentos manejaba el esférico el conjunto verdiblanco y en otros instantes del partido, era el Sevilla el que intentaba llegar al área rival. Ambos buscaban crear jugadas de peligro para ponerse por delante en el marcador.
En el minuto 38, Álex Moreno se prodigaba en profundidad por la banda izquierda y el lateral derecho sevillista, Montiel hace una entrada muy dura a la altura de la rodilla y con la corrección del VAR se lleva la roja y es expulsado del partido.
Minutos después de la expulsión, el Betis conseguía enlazar una buena jugada por dentro y en un rebote, Jesús Navas se marcaba en propia, así es como se adelantaba en el marcador el Real Betis. Justo después, en una acción de contacto entre Fekir y Papu Gómez, el jugador bético también con revisión en el VAR veía la cartulina roja. Se igualaban las fuerzas y con ventaja verdiblanca llegaría el descanso.
La segunda parte empezaba con una roja a Borja Iglesias también revisada por el VAR. Mucho trabajo para los árbitros en el partido, que tenían que tomar decisiones perjudiciales sobre todo para el Betis que se quedaba con dos jugadores menos.
Como era de esperar, el Sevilla en superioridad numérica dominaría la segunda parte con el balón y mandaba en el partido. En esta situación llegaba el empate del Sevilla con un golazo de Gudelj desde muy lejos, repitiendo el gol que marcó en Mallorca. Así fue toda la segunda parte en la que el Betis tuvo que sudar sangre para no perder este derbi y al menos sacar un punto del partido.
Al final, reparto de puntos que deja al Betis bien situado arriba en la clasificación y no le causa ningún problema. Al Sevilla le viene bien por el partido en sí, pero no arregla la situación de lo que lleva en la temporada porque tendrá que seguir peleando por el descenso.
