El Real Betis Balompié, tras el naufragio europeo, volvió a recuperar su juego, su clarividencia de cara a puerta y, en definitiva, su mejor versión para vencer por 3-1 al Athletic Club en el Benito Villamarín, en un encuentro pasado por agua. Dos de los tantos del equipo de Pellegrini, supusieron el estreno goleador con la verdiblanca del Chimy Ávila y de Johnny Cardoso, el primero abriendo la lata y el segundo encarrilando el partido con un precioso disparo desde la frontal, confirmando que los fichajes de invierno están aportando esa cuota de gol que le viene faltando al equipo.
Y es que, el dato es que, obviando el gol en propia puerta de Yuri, los últimos cuatro goles anotados por el Real Betis han sido por mediación de las cuatro incorporaciones invernales. El primero de ellos, fue el 0-2 en el Nuevo Mirandilla, obra de Pablo Fornals, en una prodigiosa jugada personal desde la derecha culminada con un disparo con la zurda al palo largo, que además está nominada a gol del mes en LaLiga.
El siguiente no fue otro que el que anotó Cédric Bakambu de tacón para adelantar a los verdiblancos en Zagreb, en un encuentro donde el Betis terminó eliminado y el propio futbolista congoleño lesionado del sóleo. Un día que fue evidentemente amargo para el Real Betis, pero en el que se pudo constatar la valía y el instinto del delantero ex del Galatasaray, al que por desgracia Pellegrini no espera hasta dentro de aproximadamente un mes.
Hoy, se han sumado a esta estadística el Chimy y Johnny, con otros dos tantos de bella factura, claves para brindar la victoria a su equipo y a los béticos, que lo necesitaban tras unas últimas semanas con muchas dudas. Los cuatro fichajes de invierno ya han visto puerta y, como no podía ser de otra forma, han irrumpido con fuerza en los planes del Ingeniero, que hoy, en un momento complicado, ha logrado volver a la sexta plaza y dar un paso importante para conseguir la cuarta clasificación para Europa de manera consecutiva.
